Para muchos quizás era demasiado joven, para otros un poco soñador. Sin embargo, esos prejuicios alentaron aún más a Cristián Figueroa a continuar y trabajar para consolidar su panadería, negocio que si bien iba andando, necesitaba un empuje para seguir creciendo. Con ese objetivo, en 2018 el emprendedor de Chillán decidió postular con su negocio “Panadería Cristián Lo Trae” a la primera versión del concurso de emprendimiento Impulso Chileno, de Fundación Luksic. Tenía 22 años y competía contra otros 8.000 emprendedores de todo el país.
Con una muy buena presentación y pitch a ojos del jurado y los asistentes de la primera gran final del concurso, Cristián se convirtió en uno de los grandes ganadores e incluso logró estar dentro de los 20 primeros lugares. Recibió financiamiento y acompañamiento académico durante 6 meses con la Escuela de Administración de la Universidad Católica.
Impulso Chileno es un concurso e iniciativa que se enmarca en el área de emprendimiento de la Fundación Luksic. En sus tres versiones ha recibido más de 30 mil postulaciones de todo el país y ha premiado a 220 emprendedores con financiamiento y acompañamiento durante 6 meses, para que puedan sacar adelante sus negocios.
“En Impulso Chileno conocí y aprendí de muchos emprendedores, hice grandes redes de apoyo y de contacto. Recibí muy buenos consejos de los mentores. Gané y pude financiar maquinarias, activos fijos y sobre todo aprender a hacer un modelo de negocio. Hoy lo que más destaco es la experiencia gracias a las mentorías”, dice Cristián.
Esa experiencia, según dice, le enseñó a no decaer, ya que después de haber ganado Impulso Chileno, la situación económica fue muy difícil y afectó mucho su negocio, incluso llevándolo a perder gran parte de lo avanzado. Se vio en la obligación de partir de nuevo, pero como buen emprendedor, siguió trabajando y buscando nuevas oportunidades. Junto a su cuñado y ahora socio, Felipe Yáñez, empezaron nuevamente.
Poniendo en práctica lo aprendido, en julio de 2020 y a pesar de la constante amenaza de las cuarentenas, Cristián y su socio relanzaron la panadería, ahora llamada “Nomade Bakery”, con nuevas líneas de proceso, una línea original en productos de masa madre, además del pan tradicional con levadura, panes integrales y pan de semilla.
Empezaron vendiendo entre 30 y 40 panes a la semana y de a poco ganando la confianza de la gente y dueños de locales, que preferían sus productos antes que ir al comercio tradicional. En tan solo cuatro meses, Cristián logró resultados sorprendentes: vender entre 400 y 500 panes a la semana en 25 puntos de venta de Chillán e incluso generar empleo ya que tuvo que contratar trabajadores. Sus clientes ahora pasarían a ser almacenes de barrio, emporios, verdulerías y cafés. De hecho, su principal cliente es la famosa hamburguesería local “Randys Burgers” de Chillán.
Figueroa cuenta que las ventas “han subido mucho” y que con trabajo y dedicación han logrado hacerse conocidos en la zona y sumar cada día más clientes. De hecho, Cristián está probando nuevas recetas para lanzar nuevos productos, aprovechando el crecimiento exponencial que ha tenido el negocio. Además, junto a su socio están postulando a un fondo Corfo para seguir escalando: “Pudimos pegarnos el salto. Ahora con Nomade Bakery nuestro objetivo es, dentro de las próximas semanas, cerrar nuevos puntos de venta en Concepción y en Los Ángeles. A futuro también queremos meternos en el mundo del retail”, comenta.
Aún no se definen las fechas de postulación para la cuarta convocatoria de Impulso Chileno 2021. Todas las novedades y próximos requisitos serán anunciados a través de las redes sociales oficiales del concurso.