Karina Riquelme está vestida con su uniforme azul marino y zapatillas blancas. Son cerca de las 9 de la mañana y sube rápidamente por las escaleras del segundo piso en el ala Oriente Mehi del Parque Arauco. Al llegar, se detiene frente a la sucursal de Salcobrand. En minutos, grabará el spot oficial del lanzamiento de sus productos de dermocosmética Tissé, que a partir de abril se venderán a lo largo de todo Chile a través de la farmaceútica. Respira hondo: “Qué bonito, qué emocionante. Para llegar hasta aquí ha sido un largo camino”, dice entre risas.
Y efectivamente toda esta historia partió hace más de 10 años cuando su primera hija fue diagnosticada con dermatitis atópica, enfermedad que las acompañará toda la vida. “Fue una etapa súper difícil, porque mi hija tenía lesiones en diversas partes del cuerpo. Como papás buscamos durante años productos que pudieran de verdad ayudarla en el cuidado y mantención de su piel y nunca los encontramos”, dice Karina.
La dermatitis atópica es una inflamación crónica y pruriginosa de las capas superficiales de la piel. Los síntomas más comunes son manchas de color rojo, piel seca, granitos, erupciones y costras. De acuerdo a datos publicados por la campaña “Tengo Dermatitis Atópica”, de dermatólogos chilenos especialistas en dermatitis atópica, el 10% de la población mundial sufre esta enfermedad con un 60% de los casos presentados en el primer año de vida. En Chile, las estadísticas de la campaña indican que 3 de cada 10 personas la padecen.
Riquelme es enfermera y al no encontrar productos que aliviaran los síntomas de su hija decidió investigar por su cuenta qué fórmulas usaban las marcas tradicionales y de qué manera podía resolver el problema. Soñar, pero soñar en grande. “Cuando me dediqué a estudiar me di cuenta que muchos de los productos tienen componentes químicos derivados del petróleo sintético y los otros componentes no cumplían funciones específicas para la piel”, explica la emprendedora.
Así fue como empezó a tomar cursos y aprender de manera autodidacta. “Partí en mi cocina, a baño maría, utilizando avena, caléndula y materias primas de origen vegetal, usando una mini pimer especial y una manga pastelera. ¡Así de verdad empezamos!”, dice Karina.
Al probarlas, la piel de sus hijas tuvo increíbles y excelentes resultados. Empezó a regalar muestras a familiares y conocidos quienes tuvieron la misma experiencia. Riquelme se dijo que si esto además podría ayudar a otras familias que estuviesen pasando por su misma situación, sacarlo adelante sería su misión.
Con esa idea, en 2018 postuló y fue una de las ganadoras del programa Impulso Chileno de Fundación Luksic, a través el cual recibió $10 millones de pesos para invertir en su negocio y clases y mentorías con expertos para sacar adelante su idea. Con el apoyo del programa pudo financiar un convenio con un laboratorio, comprar materia prima, certificar sus primeros productos con el ISP y crear su marca Tissé. Después cuenta que golpeó muchas puertas: “fui donde estaban todas las marcas más reconocidas y nadie me pescaba, hasta que en uno me recibieron muy bien, confiaron en mí y sacamos una crema corporal y de manos”. Después, entre 2020 y 2021, fue una de las ganadoras de Startup Chile, se adjudicó el fondo Crece de Corfo y recibió apoyo de UDD Ventures.
De esa manera siguió certificando sus productos con respaldo dermatológico, hipoalergénicos, apto para pieles sensibles, libre de parabenos y una máxima concentración de ingredientes. Karina logró un producto chileno de innovación en biotecnología. Desde que empezó en la cocina de su casa, hasta hoy, ha quintuplicado sus ventas, capitalizando $200.000.000 en el último año.
“Con el objetivo de consolidar Tissé en el mercado nacional fuimos a Mujeres Empresarias y nos hicieron el nexo con Salcobrand”, cuenta la emprendedora. A lo que agrega: “Nos estábamos preparando para un levantamiento de capital. Al presentar la marca y contar la historia, les gustó mucho el impacto. Me preguntaban si los productos eran extranjeros o si los fabricaba yo y quedaron sorprendidos de que fuese chileno, certificado y que nació de un problema personal como familia”.
Mehilin Vásquez, subgerente comercial de Salcobrand, explica que en búsqueda de nuevos negocios y productos diferenciadores se pusieron en contacto con Karina para que pudiera distribuir correctamente sus productos. “Tissé presentó su línea de cremas y aceites; y su expertise en el cuidado de la piel y eso fue tomado por nuestro holding. A partir de abril será marca exclusiva de Salcobrand y venderá sus tres líneas de ocho productos en todo Chile a través de nuestro e-commerce y en una primera instancia en 80 sucursales físicas”, dice Mehilin.
La subgerente comercial explica que Tissé es la única marca, y chilena, que tiene la farmacia para pieles atópicas y con componentes de este tipo. Venderá aceites de arroz, avena, marula, crema corporal, facial, para manos, jabones y shampoos para pieles delicadas.
“Estoy muy contenta, es super impensado. Uno siempre sueña que puede lograr grandes cosas pero nunca pensé que podía ser tan rápido. Saber que vamos a ayudar a mucha gente, es lo que más me motiva porque yo lo vivo todos los días con mi hija. Si bien sus problemas se van a presentar toda la vida, la mantención y el tratamiento son fundamentales”, explica Riquelme.
Karina pone sus productos en las góndolas de exhibición de Salcobrand. Mientras le toman fotografías y graban videos se ve feliz y orgullosa. “Los que estarán disponibles para todo Chile en salcobrand.cl”, con esa frase termina de grabar el primer spot.
Comenta que estar a la altura y al lado de grandes marcas internacionales de dermocosmética es difícil y un camino con muchas barreras, cosas que cumplir y estándares que respaldar, pero que con Tissé se preocupó de hacerlo bien: “Competir y ser una marca nacional referente en el cuidado de pieles delicadas es super importante. Estar en Salcobrand y ser una marca exclusiva en el cuidado dermatológico es un sueño, pero un sueño hecho realidad”.
