Durante los últimos años, la comunidad rural de Queipul, ubicada en la comuna de Victoria, Región de La Araucanía, ha sido severamente afectada por incendios forestales, impactando de gran manera a sus habitantes, en su mayoría mapuches. Esto ha significado muchas veces la pérdida de viviendas, enseres y animales, impulsado a sus residentes a organizarse de manera espontánea para enfrentar el fuego, sin contar con los recursos o información necesarias.
Ante esta situación, el profesor e investigador de la Universidad de La Frontera, Álvaro Hofflinger, se encuentra desarrollando un proyecto para evaluar si el acceso a información científica sobre incendios forestales puede mejorar la percepción de riesgo en la comunidad y fomentar la organización local en estrategias de prevención y mitigación. La iniciativa es realizada a través del apoyo del Luksic Scholars Fund, un programa de Fundación Luksic que ofrece financiamiento para que personas que han participado en algún programa de Formación Internacional puedan seguir desarrollándose en sus respectivos campos.
Desde que fue seleccionado como uno de los 16 proyectos del Luksic Scholars Fund 2024, la iniciativa ha avanzado en tres etapas clave. En la primera fase, se realizaron 20 entrevistas a jefes de hogar afectados por los incendios de 2023 y 2024 para conocer su percepción del riesgo y las estrategias que han implementado de forma individual y colectiva.
En la segunda etapa, se instaló una estación meteorológica en la comunidad, la cual entrega datos sobre condiciones climáticas que favorecen la propagación del fuego, como altas temperaturas, baja humedad y vientos fuertes. Esta información, junto con datos de incendios activos proporcionados por el sistema FIRMS de la NASA, fue compartida semanalmente a través de un grupo de WhatsApp denominado “Incendios Queipul”. Además, se realizó un taller participativo para explicar la utilidad de los equipos y cómo interpretar los datos proporcionados.
Actualmente, en la tercera y última etapa, se está entrevistando nuevamente a las familias participantes para evaluar si el acceso a información científica ha incrementado su percepción de riesgo. Asimismo, se llevará a cabo un focus group para analizar la experiencia comunitaria con el proyecto y explorar la posibilidad de desarrollar un plan de mitigación comunitario.
Motivación y origen de la iniciativa
El interés de Hofflinger en esta problemática nació tras los devastadores incendios del verano de 2023 en la provincia de Malleco, donde él creció y donde varios de sus conocidos fueron afectados. “Las alarmas de evacuación llegaban a los teléfonos, pero la gente no sabía dónde ir. No existen planes comunitarios, rutas de evacuación o zonas seguras claramente definidas en sectores rurales”, explica el investigador.
Su experiencia en el programa Harvard DRCLAS Luksic Visiting Scholar fue clave para darle forma a esta iniciativa. Durante su estadía en Estados Unidos, asistió a un panel sobre políticas públicas y desastres naturales, donde se concluyó que, a diferencia de otros desastres, los incendios forestales requieren estrategias de mitigación desde las propias comunidades. “Las políticas top-down no son efectivas en estos casos. Se necesita un enfoque bottom-up, es decir, que surja desde la organización local”, sostiene Hofflinger.
Durante los incendios de este verano, los habitantes de Queipul usaron el grupo de WhatsApp para compartir dudas y recibir información en tiempo real. “Las infografías con datos de la NASA y CONAF fueron clave para que la comunidad tuviera información confiable sobre los riesgos y pudiera tomar decisiones más informadas”, destaca Hofflinger.
El objetivo a futuro es desarrollar una metodología replicable para diseñar planes de mitigación participativos en comunidades rurales. “Queremos demostrar que el acceso a información científica y la organización local pueden marcar la diferencia en la prevención y mitigación de incendios”, concluye el investigador.
